Se trata de un tratamiento estético que consiste en aplicar aire al cuerpo para estimular y reactivar la circulación. Para hacerlo es necesario que la persona se introduzca en un traje neumático dotado de un determinado número de cámaras que distribuyen presiones de aire a lo largo de las zonas del cuerpo afectadas.
Se ha vuelto muy popular en los últimos años debido a sus efectos positivos en la recuperación muscular y la prevención de lesiones. Esta técnica consiste en la aplicación de presión en las piernas a través de unas botas especiales que se inflan y desinflan de manera controlada.
El objetivo de la presoterapia es estimular el sistema linfático y mejorar la circulación sanguínea en las extremidades inferiores, lo que ayuda a reducir la inflamación, eliminar las toxinas y mejorar el flujo sanguíneo hacia los músculos. De esta manera, se logra una recuperación más rápida después del ejercicio y se previenen las lesiones.
Esta técnica se ha convertido en una herramienta imprescindible en la rutina de muchos deportistas, especialmente en aquellos que practican disciplinas de alto rendimiento. Además, también es utilizada en el ámbito estético, ya que proporciona una disminución del volumen y tonificación de las piernas, combate la celulitis y mejora el aspecto de la piel.
La presoterapia es un tratamiento completamente indoloro y seguro, y su duración suele ser de unos 30 minutos. Se recomienda realizar varias sesiones para lograr resultados óptimos. En conclusión, la presoterapia se ha convertido en una técnica muy popular en el mundo deportivo y estético gracias a sus múltiples beneficios. Si eres un deportista profesional o simplemente buscas un tratamiento para mejorar la salud y apariencia de tus piernas, la presoterapia puede ser una excelente opción. ¡No dudes en probarla!
Entre sus principales beneficios se encuentran los siguientes:
– Es un tratamiento programable, que puede ir regulando y adaptando su intensidad a las necesidades del paciente.
– Produce una sensación de confort y relajación de las piernas, sobre todo en aquellas personas que trabajan la mayor parte de su tiempo y que tienen diferentes problemas de circulación.
– En las embarazas, ayuda a controlar la retención de líquidos provocada durante los últimos meses de gestación.
– Previene la celulitis y ayuda a eliminar el exceso de sangre que se acumula en las venas.
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